VISITA CULTURAL A SEVILLA 2022
La Asociación de Propietarios de Casas Históricas y Singulares, a la que pertenezco desde hace una década, ha organizado una Visita Cultural a Sevilla para el fin de semana del 11 al 13 de noviembre. En años anteriores habían organizado visitas a diferentes ciudades de España y de otros países de Europa pero no había tenido ocasión de poder asistir. Sí que he podido asistir a visitas a edificios históricos y singulares de Madrid, como el Palacio de Abrantes, sede del Instituto Italiano; el Palacio de Amboage, sede de la Embajada Italiana y la Residencia de la Embajada de Francia, todas estas visitas fueron en 2014. Este año he pedido en el colegio un "día de libre disposición" para poder apuntarme al viaje.
VIERNES 11
Tomamos el AVE a Sevilla en clase turista, fue puntual en la salida y en la llegada a la estación de Sevilla- Santa Justa. 
Allí tomamos el autocar que nos ha estado desplazando por la ciudad y alrededores y el último día nos llevó a visitar Palma del Río y a la estación del AVE de Córdoba. Nos llevó a los Jardines de Murillo donde nos esperaba Enrique
de la Cova- Maestre, que ha sido nuestro anfitrión durante todo el
viaje, quien ha organizado todas las visitas culturales a los diferentes
monumentos, palacios y edificios históricos y singulares. Un hombre muy
activo, muy buen conversador y siempre atento y respetuoso con todas
las personas que integrábamos la "expedición". Los maleteros del Hotel Las Casas de la Judería recogieron nuestras maletas y las llevaron al hotel mientras el grupo, guiados por Enrique, caminamos directamente al Restaurante Modesto a comer. Se había reservado un menú pero le dije al camarero que era vegetariano y me hicieron algunas variaciones en los platos. Tras la comida fuimos a visitar el
CONVENTO MADRE DE DIOS
Nos lo enseñó un señor muy entusiasmado por la recuperación y restauración del edificio.Se fundó en 1472, pero tras una inundación en 1495, la reina Isabel I de Castilla les concedió una casas de la antigua judería. Se considera panteón de ilustres personalidades, entre ellas tres biznietas de Cristóbal Colón que profesaron en el convento y Beltrán de Cetina, padre del poeta Gutierre de Cetina (tiene calle en Madrid).
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En origen todo el interior estuvo recubierto de pan de oro, aún quedan algunos rastros:
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El guía nos dijo que se considera que la escultura de santa Catalina representa en realidad el martirio de Hipatia de Alejandría:
LAS CASAS DE LA JUDERÍA
Tras la visita fuimos al hotel Las Casas de la Judería, donde descansamos una media hora. Está conformado por varias casas palacio enclavadas en el antiguo barrio judío. Desde la recepción hasta la habitación hay que atravesar por varios patios interiores en una suerte de laberinto. Nos tocó una habitación en un piso tercero (con ascensor). Son habitaciones más bien pequeñas, con techo bajo, pero con camas muy altas. El cuarto de baño incluye un plato de ducha y una bañera (por cierto que fui bastante patoso con la ducha, no conseguía que estuviera a la temperatura adecuada, el segundo día terminé metiéndome en la bañera, después descubrí que era problema de mi deteriorada vista). El lavabo tiene dos senos pero muy juntos, no podíamos utilizarlos los dos a la vez. Lo mejor es la planta sótano donde se ubica el restaurante para el desayuno, decorado con paredes cubiertas con piedras de colores a modo de mosaicos que me recordaron las obras arquitectónicas de Gaudí. El buffet no es tan variado como otros que he probado, pero es más que suficiente. El alojamiento tiene cuatro estrellas porque incluye piscina en el piso quinto que no llegamos a ver.
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Nos pusimos ponernos las chaquetas para asistir a una de las visitas más interesantes del viaje. Volvimos a los jardines de Murillo a tomar el autocar.
HACIENDA LA SOLEDAD
Es un antiguo negocio de aceites construido en el siglo XVI. Actualmente ha sido restaurada y reconvertida en local para la celebración de grandes eventos, propiedad de los hermanos Maestre Benjumea, familiares de nuesro anfitrión Enrique Moreno de la Cova Maestre. Son seis hermanos de los cuales allí estaban tres hombres y una mujer para recibirnos con unas copas de vino y enseñárnoslo. Un lugar espectacular, lo más impresionante las inmensas vigas del molino. Tras la visita la familia nos obsequió con un coctel a base de canapés variados, muy elaborados y sorprendentes. Aunque habia pocas opciones vegetarianas sí pude comer del pan relleno de queso, y sobre todo varios de los llamados "huevos explosivos". El vino (y otras bebidas) no faltaron desde la llegada hasta la despedida. En todo momento los propietarios estuvieron acompañándonos, dándonos explicaciones, atendiendo a nuestras preguntas e incluso interesándose por nosotros. El punto crítico se lo pongo a las cofias de las camareras que nos recordaron a las películas de Gracita Morales.
SÁBADO 12
REAL MAESTRANZA DE CABALLERÍA
El autocar nos llevó hasta la Real Maestranza de Caballería. En 1248 se fundó una Hermandad Caballeresca por los caballeros que acompañaron al rey Fernando III, el santo en la conquista de la ciudad. El fin era adiestrarse en el manejo de las armas y las prácticas ecuestres y estar preparados para el combate. Aunque desapareció la hermandad, en 1670 se fundó el Real Cuerpo de Maestranza de Caballería de Sevilla para seguir formando en el arte de la jineta a los oficiales del ejército y entrenarlos para la guerra al servicio de la Corona de Carlos II. El palacio alberga dos bibliotecas, la más bella es la que contiene los libros más recientes:
La Maestranza tiene anexo el museo de la tauromaquia y la plaza de toros que también nos enseñaron. Como curiosidad, cuando se inauguró desde las gradas reservadas a los caballeros de la Maestranza se podía ver la Giralda y parte de la catedral, ya que el ala opuesta estaba sin concluir. Ahora aún podemos ver parte de la Giralda.
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De la exposición que hizo la guía lo que más me interesó fue que confesara que en realidad la tauromaquia empezó como un entrenamiento para los caballos que iban a ir a la guerra. En esos primeros tiempos solo se toreaba a caballo y los toreros no tenían ninguna relevancia, solo tenían que matar el toro, lo importante era la exposición de los caballos a las astas de los toros, para que pudieran después resistir en la batalla. Y como nexo más evidente en el museo taurino se exponen unas cabezas de moros que se utilizaban para entrenar a los militares cristianos. Y a la entrada de la plaza encontramos un "calabozo", la guía nos dijo que allí encerraban a los toreros cuando se negaban a salir al ruedo. Realmente puedo decir que recomiendo la visita a antimilitaristas y antiespecistas, el conocimiento es poder:
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PABELLÓN ESPAÑOL DE LA EXPOSICIÓN IBEROAMERICANA DE 1929
Al parecer todo el mundo lo conoce con en nombre de "capitanía general", ya que fue ocupado militarmente en 1938. El militar que nos lo enseñó, jefe de protocolo, es un hombre muy amable, simpático y respetuoso. "De respanfilón" nos dejó caer que gracias al ejército esta parte visitable de la Plaza de España, está en mejor estado que el resto que pertenece a organismos civiles. La verdad es que es un edificio muy hermoso, el más espectacular de todo el viaje. Aunque se inaugurara en 1929, se construyó a partir de 1922, con un estilo modernista muy elaborado y preciosista, integrando elementos barrocos y renacentistas extraídos de monumentos sevillanos construidos desde el siglo XVI al XVIII. 
Los leones de bronce son el molde de los leones de la puerta del Congreso de Diputados.
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Busto de Gonzalo Fernández de Córdoba, de Ricardo Bellver y Ramón, vaciado del original que se encuentra en la Real Academia de Bellas Artes de san Fernando, donada por D. Mariano Bellver Utrera. A lo largo del viaje me he encontrado varias veces con referencias al personaje que da nombre al colegio donde trabajo.
Alberga un teatro que durante la muestra de 1929 tuvo un amplio programa de actos y hoy en día se utiliza para actos religiosos y militares. Capacidad para 600 personas. Lo más bello es la vidriera de la bóveda: 
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CASA DE PILATOS
Nos recibió el director general de la Fundación Casa Ducal de Medinaceli. La casa surgió en el último cuarto del siglo XV, pero tuvo numeroras transformaciones durante el Renacimiento y posteriormente en el siglo XIX. Es uno de los edificios más bellos de la ciudad, sin embargo el guía tenía muy poca voz, hablaba muy bajo y a veces incluso de espaldas al grupo, no pude centrarme en casi nada de lo que expuso. Pero sí pude oirle presentar con total naturalidad a Antinoo como el amante de Adriano quien lo elevó a divinidad, lo cual me satisfizo. Por otro lado los artesonados mudéjares de los techos no estaban iluminados y no se podían disfrutar. Lo mejor el contenido escultórico.
Nos recibió el director general de la Fundación Casa Ducal de Medinaceli. La casa surgió en el último cuarto del siglo XV, pero tuvo numeroras transformaciones durante el Renacimiento y posteriormente en el siglo XIX. Es uno de los edificios más bellos de la ciudad, sin embargo el guía tenía muy poca voz, hablaba muy bajo y a veces incluso de espaldas al grupo, no pude centrarme en casi nada de lo que expuso. Pero sí pude oirle presentar con total naturalidad a Antinoo como el amante de Adriano quien lo elevó a divinidad, lo cual me satisfizo. Por otro lado los artesonados mudéjares de los techos no estaban iluminados y no se podían disfrutar. Lo mejor el contenido escultórico.
Construído en el siglo XVI, conserva detalles arquitectónicos. Está habitado por una mujer que pertenece a la Asociación, y nos obsequió con una expléndida comida en su salón comedor, en una esplendorosa mesa alargada para los cerca de treinta comensales. También me hicieron platos especiales como el milhojas de berejena. 
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De allí fuimos caminado hasta el Palacio de las Dueñas, en el camino pude fotografiar algún otro edificio singular
Y el futurista Metropol Parasol de Jurgen Mayer, 3500 metros cuadrados con seis parasoles de madera microlaminada de pino finés recubiertas de poliuretano impermeable, transpirable y flexible. Se la conoce popularmente como "las setas". Las obras del Metropol Parasol dejaron al descubierto restos romanos desde Tiberio (ca. 30 d.C.) hasta el siglo VI y una casa islámica almohade de los siglos XII y XIII que han quedado ubicado en un espacio diáfano de 4879 metros cuadrados. 
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PALACIO DE LAS DUEÑAS
Construido entre los siglos XV y XVI. Desde el siglo XVII pertenece a la casa de Alba. En el siglo XIX fue convertida en casa de vecinos, sus salones compartimentados con tabiques y los artesonados cubiertos con cielos rasos. Estos detalles me recordaron la situación de mi casa medieval de Úbeda cuando fue adquirida. Uno de los inquilinos y administrador del Palacio fue Antonio Machado Álvarez, y por eso aquí nació el poeta Antonio Machado en 1875. Estilo gótico- mudéjar y renacentista, con cuatro jardines y dos patios. Habitualmente se visita la planta baja, pero a nosotros empezaron por enseñarnos la planta alta donde se ubican los dormitorios. Especialmente el de Eugenia de Montijo. Nos contó la guía que Eugenia era hermana de Paca, Paca se casó con el duque de Alba, momento en el que Eugenia pasó a formar parte de la historia de la casa de Alba. Poco después Eugenia se casó con Napoleón III y se hizo emperatriz. La duquesa Cayetana le tenía mucho cariño a su antepasada emperatriz, por lo que en el palacio de las Dueñas hay muchos retratos de Eugenia, además del dormitorio. Tras visitar la planta alta bajamos a unirnos a la visita nocturna teatralizada, en la que Antonio Machado, Eugenia de Montijo y Cayetana de Alba viajan en el tiempo para encontrarse y enseñarnos la planta baja. Como había otras personas para esta visita nos dividieron en tres grupos y el grupo de la Asociacion se lo asignaron a Antonio Machado. Tras mostrarnos los patios y jardines y algunos salones incluido el salón de los carteles, subimos de nuevo a la planta alta donde nos invitaron a un aperitivo de quesos y vinos.
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."La Pinrrelito" de Mariano Benliure:
Nos llevaron al hotel para descansar media hora y salimos de nuevo para cenar en el Hotel Alfonso XIII, habían reservado en la terraza. Durante todo el viaje hemos tenido un tiempo magnífico, soleado, con muy buena temperatura incluso por las noches.
LA GIRALDA: 
EL TRANVÍA: 
Cenamos muy bien, aunque me repitieron el milhojas de berenjena. Volvimos en taxi con un compañero del viaje. Por cierto que se trata de un familiar de Natalio Rivas, el propietario recientemente fallecido del Palacio Vela de los Cobos en Úbeda, hombre que además de estar activo enseñando el palacio hasta sus últimos momentos ya casi centenario, estaba enamorado de mi casa medieval y la visitó varias veces cuando yo estaba en ella. Gracias a él conocí la Asociación de Propietarios de Casas Históricas y Singulares y me asocié. A lo largo del viaje conversamos varias veces sobre Natalio, con su familiar y con otros compañeros del viaje.
DOMINGO 13
Tras el desayuno hicimos el check out y tomamos el autocar rumbo a Fuentes de Andalucía.
DOMINGO 13
Tras el desayuno hicimos el check out y tomamos el autocar rumbo a Fuentes de Andalucía.
CASTILLO DE LA MONCLOVA
Antes de llegar al castillo vimos en lontananza el deslumbrante faro de energía solar:
El castillo se construyó en el siglo XVI, pero la guía nos contó que bajo el pavimento hay restos de la época romana de una ciudad turdetana llamada Obúlcula. Actualmente pertenece por herencia a Iván de Arteaga, aunque por edad debería haberlo heredado su hermana mayor Almudena. Tras la visita también nos invitaron a un tentempié con degustación de aceite y dulces de la tierra y tés. 
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En uno de los baldosines del suelo dejó su firma el arquitecto en forma de autorretrato:
Bella biblioteca:
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La capilla:
La familia Artega se siente orgullosa de ser descendientes directos de Garcilaso de la Vega:
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CONVENTO DE SANTA CLARA- MUSEO VICTORIO Y LUCCHINO
Y tomamos el autocar hacia Palma del Río. Pasamos por Écija divisando algunas de sus famosas torres: 
Al llegar a Palma del Río pasamos junto a la iglesia:
Y entramos a ver el museo de Victorio y Lucchino ubicado en el antiguo convento de santa Clara.
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A la salida del museo nos regalaron un magnífico catálogo ilustrado del patrimonio histórico, artístico, monumental y natural de Palma del Río, editado por el Ayuntamiento de Palma del Río.
PALACIO DE PORTOCARRERO
Otro de los monumentos que más me han fascinado del viaje. Es propiedad del matrimonio Moreno de la Cova- Maestre, quienes han organizado todo el viaje cultural. Nos lo enseñó Cristina Ybarra, cónyuge de Enrique, una joven pero madura mujer encantadora, con don de gentes y magnífica conversadora, que además de ser pintora y artista y haber sido artífice de la restauración del palacio, ha construido en el jardín un museo vivo de la naranja, con más de 400 cítricos, conservando el sistema de riego original almohade.
En el siglo XIII, en época almorávide, bajo el mandato del califa Bu Ya Que Yusuf se construyó el recinto amurallado de Palma del Río, parte de la muralla se conserva en el Palacio, además de restos de amurallamiento romano.
Esta visita es pública y siempre invitan a quienes asisten a unas naranjadas y limonadas.
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Comimos en el monasterio de san Francisco, ahora restaurado y reconvertido en restaurante por su propietario, Alonso Moreno de la Coba (hermano de nuestro anfitrión Enrique). Fue un monasterio franciscano construido en 1492. Estuvo activo hasta la desamostización de Mendizábal en el siglo XIX, y fue adquirido por entepasados de los actuales propietarios. Conserva tres claustros y los jardines y huerto del monasterio. En uno de los claustros nos sirvieron un cóctel de bienvenida y después pasamos al comedor. Compartimos mesa primero con la pareja del propietario y después con el mismo propietario. Me interesó mucho que la mujer nos estuvo contando que regentaba un refugio para perros abandonados, nos dijo que la población de la zona está ahora más concienciada que hace 20 años contra el maltrato animal. Me hicieron la mejor comida del viaje. Y nos enseñaron los jardines y algunas estancias.
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Tras esta última visita el autocar nos llevó hasta la estación del AVE de Córdoba de donde salió el tren a las 19:27 y puntualmente llegó a Atocha a las 21:17.
COMENTARIOS FINALES
Es la primera vez que hago un viaje con la Asociación de Propietarios de Casas Históricas y Singulares. En general las personas que conformaron el grupo han sido amables, respetuosas y buenas conversadoras. En cambio yo soy muy mal conversador y me ha costado relacionarme. Por lo que, a pesar de compartir mesas y visitas, he llegado a cruzar pocas palabras con pocas personas. Aún así he podido hablar de mi casa medieval de Úbeda a varias personas del grupo.
Es la primera vez que hago un viaje con la Asociación de Propietarios de Casas Históricas y Singulares. En general las personas que conformaron el grupo han sido amables, respetuosas y buenas conversadoras. En cambio yo soy muy mal conversador y me ha costado relacionarme. Por lo que, a pesar de compartir mesas y visitas, he llegado a cruzar pocas palabras con pocas personas. Aún así he podido hablar de mi casa medieval de Úbeda a varias personas del grupo.
He constatado que el poder adquisitivo de la mayoría de las personas propietarias de casas históricas guarda relación con su ideología conservadora, y aunque se ha evitado hablar de política, sí ha habido algunos deslices que al final nos hace sentir incómodos a quienes estamos en contra pero en inferioridad numérica y preferimos obviar dichos deslices y mordernos la lengua.
Lo mejor del viaje ha sido la minuciosa organización y dedicación de Enrique de la Cova, a pesar de que se le iban los tiempos y se han tenido que dejar colgadas un par de visitas programadas. La verdad es que, como les decía recientemente a unos amigos, prefiero viajes más relajados con tiempo para descansar, hacer compras y tomarnos unos refrescos. Bueno lo de tomarnos los refrescos no ha sido necesario porque casi en cada visita nos han obsequiado con aperitivos y bebidas.
Me ha hecho ilusión poder conversar con un familiar de Natalio Rivas, pero no hemos cruzado contactos. Tras su fallecimiento ya no tengo contacto con nadie de su familia y me gustaría poder mantener esa relación.
Por otro lado, como en todos los viajes y visitas culturales, se nos han dado miles de datos históricos, arquitectónicos y familiares de los cuales me he quedado con muy pocos, pero agradezco muchísimo a la Asociación que hayan editado el librito de la visita con datos de todos los lugares visitados.
En cualquier caso hemos disfrutado mucho del viaje. Y ojalá en años venideros se programen viajes a los que podamos volver a asistir.
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