Miguel Hernández: el poeta que hacía juguetes. Ausencias y últimos cuentos para su hijo

El viernes 5 de enero estuve en la Biblioteca Nacional viendo in extremis esta muestra sobre Miguel Hernández ya que era el último día de la exposición.
He visto otras exposiciones en la Biblioteca, pero siempre en el piso bajo, pero en este caso la exposición está ubicada en el primer piso. Desconozco si hay posibilidad de subir en ascensor, porque yo accedí primero a la planta baja y, tras tener que pasar los objetos metálicos por el escáner y pasar por el arco, allí me dijeron que volviera a salir y subiera las escaleras principales. No me dieron ninguna otra opción. No puedo comprender que en una biblioteca de esta categoría obliguen a las personas visitantes a subir esas escaleras, yo desde luego estoy muy mayor y subir escaleras me resulta cada vez más incómodo y agotador (también es verdad que ya venía caminando desde Nuevos Ministerios y este esfuerzo extra me pilló un poco cansado). Y tuve que volver a sacar los objetos metálicos y pasar por el arco. 
Lo mejor fue que era la primera vez que veía el vestíbulo de la Biblioteca y es muy palaciego.
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"Desnudo/ Aurora". Vicente Navarro Romero, 1914.
La exposición me decepcionó un poco porque no se ajustaba a mis expectativas, yo me había imaginado que iba a encontrar más reproducciones de los juguetes que Hernández construyó en la cárcel para su hijo, pero sólo había uno, el carro:
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Sí estaban los cuentos y poemas manuscritos desde el encarcelamiento:
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Pero en realidad la exposición se centra más en la exhibición en un lateral de toda las publicaciones de la obra de Hernández y las obras de diversos autores que estuvieron encarcelados:
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y en el otro lateral un gran panel con su biografía, de la que lo más interesante son los documentos relacionados con su muerte y el homenaje de los presos de Ocaña:
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Lo mejor de la exposición es la gran instalación que ocupa todo el espacio central de la sala y el techo, que representa la cama de la celda de Hernández y las lecheras en las que Josefina Manresa enviaba alimentos a Hernández. La lechera original está a su vez expuesta junto a la reproducción del carro:
Pregunté a la mujer que vigilaba la exposición que de quién era la autoría, ya que no encontré referencia de la obra en ninguna parte, pero ella tampoco lo sabía, me dijo que suponía que la misma organización de la biblioteca, algo que me extraña porque es una instalación artística, no es mero diseño museístico. 
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Aproveché para hacer fotos a algunos libros y cuadros expuestos en la antesala de la exposición.
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Curiosa esa referencia velada de la obra de Marsans, dividiendo la franja de abajo de la bandera en una parte roja y otra azul, la mezcla de ambas daría el morado de la bandera republicana. El texto dice en latín: "Haec est Annae Maria artíficis forma pulcherrimae. Quae vitam nostram pinxit orbesque alteros finxit", que traducido sería: "Esta es la imagen más bella de Ana María la artista. Quien pintó nuestras vidas y dio forma a otros mundos".

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