CANTABRIA 2024

Tras el paso por el festival de teatro de Almagro mis amistades nos llevaron hasta Cantabria. En el camino cominos en el Parador de Lerma, sopa de guisantes y rollito vietnamita, muy buena comida pero fueron muy lentos sirviendo.

LUNES 22 DE JULIO

Nos quedamos en el hotel Valles Pasiegos, en la población Llerana, perteneciente al grupo Akla Hoteles Rurales, que tiene otros tres alojamientos en Cantabria, todos con la particular característica de que en algunas de sus habitaciones tienen jacuzzi. Compartí con una amiga una habitación con un balcón que ostenta un inmenso escudo de piedra. Amplio dormitorio y amplio cuarto de baño completo incluido bidé, con la dificultad de que no tiene plato de ducha sino bañera, aunque con agarraderos. Magníficas vistas de la montaña desde el balcón.

Salimos a dar un paseo y vimos la Iglesia de san Lorenzo

Volvimos a cenar en el hotel, unas tostas de queso de cabra con cebolla caramelizada.

MARTES 23 DE JULIO

Visitamos la réplica de la Cueva de Altamira. Para evitar que se siga deteriorando se ha construido junto a la original una réplica exacta con todos los accidentes naturales, grietas y por supuesto pinturas. A pesar de haberlas visto muchas veces en documentales, películas y reproducciones fotográficas, y a pesar de saber que son una replica, es absolutamente impresionante verlas en directo. Fue visita guiada y la guía nos fue descubriendo las diferentes figuras de animales o abstractas, las diversas técnicas utilizadas y las diferentes capas de pintura, ya que por la misma cueva pasaron innumerables artistas a lo largo de miles de años. La cueva se completa con un museo antropológico con objetos encontrados en las excavaciones y algunas obras de arte inspiradas en las cuevas. Me compré una camiseta de Altamira.

"28 rayas" Arancha Goyeneche, 2018. Inspirada en los colgantes sobre hueso hioides de caballo

"Gran explosión", Fernando Vicente, 2004. La humanidad tuvo su origen en África

"Brillo abrigo", Irene Grau. Basada en los colores de los óxidos de hierro.

Fuimos a comer al Parador de Santillana del Mar.

Tras la comida entramos en la colegiata para ver el claustro con capiteles románicos. Había una exposición de seda china.

Hicimos la visita guiada a la ciudad de Santillana del Mar, que se caracteriza por casas y palacios medievales con variedad de escudos heráldicos.

Tras la visita guiada entramos a ver el Palacio de Velarde. Es una visita presentada por hologramas de las personas que a lo largo de la historia han habitado el palacio. Muy didáctica y amena. Como curiosidad aquí estuvo escondido uno de los espías nazis más buscados, Reinhard Spitzy.

La gracia del paseo, hablando de anécdotas:

Cenamos al aire libre en un bar junto al hotel, unos huevos fritos con patatas.
MIÉRCOLES 24 DE JULIO

Visitamos la cueva El Castillo. Es una de las cuatro de la zona con pinturas rupestres y que se pueden aún visitar, aunque de hecho una de ellas estaba cerrada. Es inmensa, 760 metros de larga, con pinturas y grabados impresionantes. Se visita en grupos de 12 personas y durante un tiempo limitado, pero ya se considera muy numeroso, en pocos años se terminará cerrando al público y se construirá una réplica como se ha hecho con la de Altamira, ya que se están perdiendo algunas pinturas por culpa del vaho de la respiración y los roces involuntarios al caminar porque el suelo es resbaladizo. La cueva tiene el encanto de las formaciones kársticas con sus estalactitas, estalagmitas, columnas, y esculturas naturales como la gran oveja, pero la visita se centró en el arte rupestre. Una auténtica visita histórica ya que seguramente nuestras siguientes generaciones no podrán verla en directo. Ha sido, desde luego, la experiencia más emocionante del viaje. Evidentemente no se podía hacer fotos.

PUENTE VIESGO. Paseamos con la ciudad de Puente Viesgo, visitamos la iglesia neorománica,

"Cristo". Jesús Otero, 1970

La antigua estación,

Fuimos a comer al restaurante La Unión.

SANTANDER

Y llegamos a Santander, fuimos a ver el CENTRO BOTÍN, que me decepcionó porque la colección permanente es una sala pequeña con piezas maestras, pero muy escasas. Pero el edificio es impresionante, en todos los pisos hay unos inmensos ventanales con vistas a la bahía. Había dos exposiciones temporales, la segunda que vimos no nos gustó pero la primera sí. Se trata de la exposición de Shilpa Gupta "Yo también vivo bajo tu cielo", un trabajo de investigación transhistórico y transcultural sobre poesía y represión. El contexto político del Sur de Asia en el que creció la artista, una zona geográfica con constantes conflictos sociales y territoriales, ha influido en su continuo retorno a las consecuencias de las fronteras. Así, una colección de obras sobre textil, madera, cera, junto con dispositivos participativos y analógicos, hablan de las limitaciones de movimiento y libertad debidas a fronteras psicológicas, ideológicas o físicas.

"12", Silvio Bachli, 2021

"Arlequín", Juan Gris, 1918

"Selfportrait with injured eye" Francis Bacon, 1972

Shilpa Gupta, 2024

El Faro de Cabo Mayor. Es un lugar donde tras el golpe de estado de 1936 fueron ejecutadas muchas personas que apoyaron el golpismo. Hay un monumento dedicado a las personas que supuestamente fueron despeñadas desde allí, aunque según la documentación de archivos, hemerotecas y documentación institucional consultada por los historiadores los cuerpos encontrados por la zona fueron de personas que habían caído en los alrededores, pero no despeñadas. Varios "paseos" terminaron con tiros. Las autopsias revelaron que esa fue la causa de algunos de los que aparecieron flotando. Disparos, asfixias por inmersión... no las grandes fracturas que hubiera provocado el impacto contra las rocas. Los buzos tampoco encontraron cadáveres hundidos. La hermana de uno de los fareros de la época ha declarado que allí, por entonces, había demasiados testigos, demasiada luz para algo que supuestamente se tendría que haber hecho a escondidas. Según los estudios, si acaso, podrían ubicarse allí la muerte de un grupo de siete vascos que apoyaban el golpe, algunos de ellos aparecieron literalmente machacados. En Cantabria perecieron en total 1.307 personas por la represión republicana y 2.289 por la represión golpista.

Por la noche asistimos al concierto de La Oreja de Van Gogh, dentro del Festival Magdalena en Vivo, en un escenario en la playa de la Magdalena, programado dentro de las fiestas de la Semana Grande. Durante el concierto cené un kebab de falafel.

JUEVES 25 DE JULIO

Volvimos a Santander. Visitamos la catedral de la que lo más relevante es la cripta del siglo XIII y el claustro del siglo XIV

Seguimos paseando, en varias plazas había espectáculos por ser la Semana Grande y ser día festivo, Santiago Apostol.

En la iglesia de la Anunciación había un organista tocando el órgano mientras los turistas hacíamos la visita del templo. Esta iglesia fue declarada Bien de Interés Cultural en 1992. Se trata del mejor ejemplo de arquitectura renacentista de Cantabria, un edificio renacentista, dentro del estilo clasicista vallisoletano. Sigue los modelos jesuíticos de raíz vignolesca, de hecho tiene gran similitud con la iglesia del Gesù de Roma. Tiene una sola nave rematada por cabecera rectangular, rodeada por capillas a los lados unidas por arcos de medio punto, de manera que parecen falsas naves laterales. Sobre el crucero se alza una cúpula con linterna.

Comimos en un restaurante de la zona y fuimos a la playa de la Magdalena para tomar el tren que nos lleva al palacio de la Magdalena

Seguimos paseando por el paseo fluvial viendo las playas del Sardinero

Volvimos a cenar en el bar que hay junto al hotel, unas croquetas de boletus.

VIERNES 26 DE JULIO

PALACIO DE ELSEDO. en la localidad de Pámanes visitamos este palacio del siglo XVIII de estilo barroco. Es un museo de Arte Contemporáneo que expone la segunda colección más importante de arte contemporáneo privado después del Thyssen. Todo el arte del siglo XX incluyendo a los artistas que más me atraen e influyen, desde María Blanchard a todos los de Cuenca y el informalismo. E incluso una obra de grandes dimensiones de Eugenio Granell. También obras de artistas cántabros y de otras comunidades del norte, que conocía menos pero que eran también muy relevantes. Y algunas esculturas. Incluye una capilla con arte románico. Me encantó la colección y además el palacio también es muy interesante.

"Medusia". Modest Cuixart, 1970

"Los contestatarios", Rafael Canogar, 1971

"Clausura", Maite Spinola, 1991

"Algo de 1936", Gerardo Rueda, 1970

"Los encarcelados", Rafael Canogar, 1972

"Era", Benjamín Palencia, 1969

"Gótico rojo", Pablo Palazuelo, 1970

"Relieve blanco" Leopoldo Novoa, 1970

"El invernadero", Fernando Zobel, 1970

"Molino en un rincón de la mancha", Gregorio Prieto, 1970

"Nuevas formas", Enrique Gran, 1971

"Pájaro bebiendo agua", Alberto Sánchez, 1957

"Torso para ejercicio de aro". Manuel Millares, 1969

"El prendimiento del poeta". Eugenio Granell, 1976

María Blanchard, 1920

"Retrato imaginario de Goya", Antonio Saura, 1968

"Gótico rojo", Manuel Viola, 1969

Óscar Domínguez, 1956

"Desde la penumbra", Lucio Muñoz, 1970

"Pulso", Ramón de Zubiaurre, 1962

"Las manos", Pablo Serrano, 1967

"Composición 10", Francisco Hernández, 1968

"Los amigos de Manolo", Pablo Picasso, 1905

"Paisaje", Julio de Pablo, 1967

"Objets et draperie", Francisco Bores, 1969

"Barco atracado", Pancho Cossío, 1930

Nos tomamos un vermú en Solares:

Fuimos a comer al restaurante "La Bicicleta", en Hoznayo. Tiene una estrella Michelín y adapta el menú tanto a personas vegetarianas como a celíacas. Los bocados se van sirviendo en diferentes estancias del restaurante, empezando por la terraza, después la barra, después el huerto y finalmente el salón. Todos los bocados son exquisitos, preparados en el momento delante de nosotros, con productos de su propio huerto ecológico, presentados con mucho mimo y bien explicados. Una incomparable experiencia gastronómica.